Ecografía en fisioterapia

Con profesionales y los equipos de alta gama de centros como Clínica Alhóndiga , la realización de una ecografía de músculos puede resultar de gran utilidad, en el seguimiento de un tratamiento fisioterapéutico. Las imágenes se obtienen en tiempo real, por lo que se pueden observar áreas del organismo en movimiento. Así se podrá saber si existen roturas, deslizamientos o cualquier otra dolencia que pueda surgir en una articulación.

¿Por qué recurrir a una ecografía de músculos?

La ecografía de músculos permite la exploración de las diferentes estructuras musculares y esqueléticas. Esto es de gran utilidad para la detección de patologías como:

  • Inflamaciones de los tendones (tendinitis), de las bursas (bursitis), derrames, abscesos…
  • Degeneraciones de estos tejidos, debido a enfermedades o de esfuerzos realizados durante un largo período de tiempo.
  • Traumas de todo tipo, ya sean una contusión, un hematoma, una rotura de fibras…
  • Lesiones tumorales, como quistes, tumores benignos y malignos de músculos, nervios…
  • Cuerpos extraños, como pueden ser las espinas de palmera, de pescado, de cactus, así como determinados fragmentos de madera, metal, vidrio o piedra, tan habituales en los accidentes de tipo laboral, deportivo o doméstico.
  • Evolución de la lesión, con el objetivo de saber si el paciente está respondiendo o no a un determinado tratamiento. En este tipo de situaciones, también permite la valoración de zonas que incorporan material metálico, como una muñeca operada en el que se ha colocado una placa y tornillos.
  • Embarazos, para identificar cualquier problema en el recién nacido, especialmente en lo que se refiere a la conformación de las caderas.
  • Infiltraciones. Esta técnica resulta de una gran utilidad en caso de drenajes, cuando haya que dirigir una aguja hacia el interior de un quiste o un hematoma. También en los casos en los que se haya de infiltrar un medicamento en una zona de acceso difícil o de reducido tamaño, con el objetivo de aportar precisión y seguridad a dicho proceso de infiltración.

Consideraciones adicionales sobre la ecografía de músculos

Como se puede observar, la ecografía de músculos se encarga de identificar diferentes modalidades de lesión, para evaluar con detenimiento la gravedad de las mismas, mediante un detallado seguimiento de su evolución en el paciente. Sus utilidades no acaban ahí, ya que también se puede utilizar para guiar bloqueos de nervios en algunas operaciones, con lo que se consigue eficacia y seguridad durante la aplicación de la anestesia.

Cabe recalcar que las molestias que una ecografía de músculos va a causar en el paciente son mínimas. Normalmente, solo duran en torno a un cuarto de hora, nunca más de 30 minutos. No es necesario que el paciente haya ayunado, bastando con que la zona que se va a examinar esté libre de cremas o cualquier elemento que pueda dificultar la visualización de las imágenes.